Con un llamado del Arzobispo de Barranquilla Jairo Jaramillo Monsalve a ser modelo de buena conducta y misericordia se celebró la tradicional misa crismal en la Catedral Metropolitana María Reina.

Este lunes 21 de marzo, en el marco del segundo día de la Semana Santa, Jaramillo Monsalve con los sacerdotes que conforman la Arquidiócesis de Barranquilla renovaron su compromiso con Dios, la comunidad y su iglesia.

“Seamos modelos de buena conducta para nuestros seguidores, así como lo fue Jesús, incluso, cuando fue crucificado y resucitó para ascender al cielo y estar a la derecha de Dios”, destacó el Arzobispo.

A las 10:54 de la mañana, todos los sacerdotes aceptaron seguir siendo voceros de Dios en la tierra y servir como roca para que los fieles se apoyen y tengan una experiencia más cercana con Dios.

Llamado a la paz

Durante el sermón, Jaramillo Monsalve habló sobre el proceso de paz en Colombia y resaltó que las personas no pueden ser indiferentes ante la situación por la que está pasando el país.

“Todos, desde nuestros hogares, podemos contribuir con la paz que tanto buscamos. Dando una buena educación a los niños, enseñando los valores, haciéndoles ver que la misericordia es el buen camino y mostrándoles que debemos ayudar a nuestros semejantes”, resaltó el prelado.

El acto

Esta eucaristía es signo de la unidad plena de la Iglesia, reuniendo alrededor del altar de la Catedral Metropolitana María Reina al Arzobispo como presidente, acompañado del presbiterio de Barranquilla, que junto a él y los fieles venidos de todos los rincones de la diócesis, celebran la unidad de los sacramentos.

En esta misa, además de la renovación de los obispos y presbíteros, se bendijo el Óleo de los Catecúmenos y Enfermos y se consagró el Santo Crisma, aceites que se utilizarán durante el año en todas las parroquias en la celebración de los sacramentos.